La escucha activa en la formación musical
Uno de los aprendizajes más valiosos que he tenido en este primer semestre es que escuchar no es lo mismo que oír. Oír es algo pasivo; escuchar activamente es una habilidad que se entrena, se afina y se convierte en una herramienta poderosa para cualquier persona que quiera aprender música.
La música no empieza con los dedos en un instrumento, sino con los oídos atentos, con la capacidad de percibir los detalles del sonido, de reconocer patrones, silencios, texturas y emociones.
¿Qué es la escucha activa?
Escuchar activamente significa:
-
Poner atención consciente al sonido, sin distracciones.
-
Identificar los diferentes instrumentos, ritmos, voces o capas de una canción.
-
Reconocer cambios de intensidad, de tempo, de timbre o de armonía.
-
Captar las emociones que transmite una pieza musical.
-
Ser capaz de recordar y analizar lo que se escucha.
Esta habilidad no solo es útil para estudiantes de música, también es fundamental para cualquier ser humano que quiera disfrutar la música de forma más profunda y significativa.
La escucha como parte del aprendizaje musical
En las clases de audioperceptiva y apreciación musical, practicamos diferentes tipos de escucha:
-
Escucha analítica, para identificar elementos técnicos.
-
Escucha emocional, para conectarnos con lo que sentimos al oír una pieza.
-
Escucha comparativa, para reconocer similitudes y diferencias entre obras.
-
Escucha creativa, que nos inspira a improvisar o componer a partir de lo que oímos.
Estas actividades me han enseñado que escuchar es también crear. Porque cuando escuchamos de verdad, también imaginamos, recordamos, interpretamos y hasta respondemos con movimiento o palabras.
La escucha en la educación artística
Como futura docente, sé que una de mis tareas será ayudar a mis estudiantes a escuchar más allá del ruido, a descubrir lo que la música nos dice sin palabras, a valorar el silencio tanto como el sonido.
Quiero que en mis clases los niños y niñas:
-
Se acuesten en el suelo y escuchen una canción con los ojos cerrados.
-
Dibujen lo que la música les inspira.
-
Aprendan a respetar los sonidos del entorno.
-
Escuchen a sus compañeros cuando improvisan.
Comentarios
Publicar un comentario